Un viaje, un equilibrio y un deseo
Una exploración en profundidad de la consciencia, la presencia y el equilibrio interior
*Japón 2006
MOODRA es una marca de perfumes de lujo que redefine la conexión entre aroma, identidad y emoción.
Creada por Manuel Labella, fusiona exclusividad y sofisticación con la esencia de la naturaleza y la filosofía japonesa, estableciendo un vínculo sensorial único con quienes buscan más que una fragancia, una experiencia.
Inspirada en los cinco elementos (Chi, Sui, Ka, Fū y Kū), cada creación de MOODRA va más allá de las preferencias olfativas tradicionales, permitiendo a cada persona descubrir su esencia a través de un perfume que se convierte en un ritual de expresión personal.
CHI
Fuerza, seguridad, protección
SUI
Fluidez, emoción, sensibilidad
KA
Pasión, impulso, transformación
FU
Libertad, movimiento, pensamiento
KU
Esencia, intuición, espiritualidad
Cada perfume MOODRA representa uno de estos elementos, no solo en su estructura olfativa, sino también en su carga simbólica y emocional.
Cada fragancia está concebida para resonar
con quienes desean reconocer, equilibrar o potenciar aquello que ya habita en su interior.
Desde joven, Manuel ha practicado Ninjutsu, un arte marcial japonés que no solo le enseñó técnica y disciplina, sino una manera de habitar el mundo: en armonía con la naturaleza, con respeto por el silencio y una profunda conexión con lo invisible. Con el tiempo esa visión, cristalizó en MOODRA.
Porque la marca nace justo ahí: en el punto en el que una búsqueda personal se convierte en
filosofía de marca.
MOODRA no es simplemente una marca de perfumes. Es el reflejo de una vida transformada por la espiritualidad, la disciplina y la belleza sutil de Japón.
Su fundador, no construyó MOODRA desde una oportunidad de mercado, sino desde una necesidad interna: traducir su historia en una experiencia sensorial que pudiera compartirse con los demás.
Cada viaje a Japón ha sido, para él, un regreso al origen. Una experiencia que le acercó, no solo a una cultura profundamente fascinante, sino a una forma de vida basada en la consciencia plena, la presencia y el equilibrio interior.
Allí entendió que cada persona está compuesta por energías, y que cuando estas energías se alinean, nos permiten vivir con mayor autenticidad, claridad y serenidad. Una filosofía de evolución personal a través del olor y del recuerdo.
Esa comprensión no solo lo transformó a nivel personal: se convirtió en el alma de MOODRA.
